Diplomada Universitaria en Enfermería.
Licenciada en Biología. Experto en Cuidados Paliativos.
Secretaria del Comité de Ética Asistencial del Sector Sanitario de Huesca.
Miembro del Comité de Paliativos del Sector Sanitario de Huesca.
Colaboradora en formación de especialistas en ciencias de la salud en Especialidad de Atención Familiar y Comunitaria (MIR y EIR).
Colaboradora con la Escuela de Enfermería de Huesca para los temas de Cuidados Paliativos

PONENCIA: Planificación anticipada de decisiones. Exploración de valores y deseos

La muerte en la actualidad es un acontecimiento tecnificado y medicalizado. La mayoría de las muertes ocurren en el hospital de una manera lo más aséptica posible, mientras la sociedad trata de negarla y de ocultarla, ya que tanto la enfermedad como la muerte se viven como el mayor fracaso en la biografía de una persona.
A la vez que la enfermedad y la muerte son negadas en nuestra sociedad, los avances científicos y médicos hacen que cada vez más la vida se pueda alargar, aún en condiciones que pocos seres humanos desean para ellos mismos. Hay técnicas de soporte que nos permiten prolongar la vida y lo peor de todo es que la aplicación de estas técnicas la mayoría de las veces se realiza en situaciones en las que la persona carece de capacidad de decidir.
La Planificación Anticipada de Voluntades es un proceso voluntario de comunicación y deliberación entre una persona capaz y profesionales sanitarios implicados en su atención, acerca de los valores, deseos y preferencias que cada persona quiere que se tengan en cuenta respecto a la atención sanitaria que recibirá como paciente, fundamentalmente en los momentos finales de su vida.
La finalidad última es la elaboración de un Plan conjunto, para que si la persona pierde la capacidad de decidir, puedan tomarse decisiones sanitarias de acuerdo con sus deseos y valores y responde más a una cuestión ética que legal.
Con la planificación anticipada de decisiones conseguiremos explorar en el mundo de los valores del individuo y navegar por su dimensión espiritual para poder clarificar aspectos que pocas veces se abordan en la relación sanitario-paciente. Además durante el proceso podrán intervenir los familiares que el individuo desee, lo que puede facilitar la expresión de sentimientos entre ellos y facilitar la comunicación entre seres queridos.
La planificación anticipada de decisiones proporcionará al individuo el poder apropiarse de su proceso de toma de decisiones y convertirse en el protagonista de su vida, disminuyendo también la sensación de indefensión e incertidumbre y para sus seres queridos y sus representantes supondrá la liberación de la carga de la toma de determinadas decisiones, previniendo posibles sentimientos de culpa.
El papel de los sanitarios va a ser clave para que este proceso sea posible, poderlo facilitar y acompañar a las personas en el recorrido de la planificación y posteriormente en el recorrido de su enfermedad y de su recta final, asegurándonos de que sus valores y deseos sean respetados.

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